Me dan ganas de arrancar, gritar y torturar a todo el odio hasta disiparlo.
Apretar el botón que pause toda esta situación y tomar un minuto para respirar, tan solo para comenzar a respirar...
Volver atrás para recolectar todos aquellos pedacitos que fueron perdiéndose en el tiempo y se van olvidando sin querer.
pero, eso ya no se puede.-